Es una fiesta católica que se celebrá el primer fin de semana del mes de mayo. Consiste en una procesión a pie del santo acompañado de los fieles desde la iglesia hasta la ermita de San Matías que se encuentra aproximadamente a cuatro kilómetros, donde se realizará una misa. Posteriormente, la gente pasa el día en la pradera de alrededor de la ermita con sus familiares y amigos.